domingo, 24 de febrero de 2013

Hace 13 años

Cada dos meses, más o menos, cambiaba de médicos residentes. 
Cada dos meses, más o menos, le preguntaban qué y cómo había hecho para trabajar en Emergencias.
Y cada dos meses ( más o menos) tenía que contarles un poco por encima su trayectoria, que podría resumirse en un "empecé por casualidad".
No es que no hubiera hecho nada para estar estar allí, no. De hecho, una vez que había probado el trabajo, se había esforzado mucho por estar allí: en ese determinado puesto (médico de emergencias)  y en ese determinado lugar (su casa). Pero todo había empezado por casualidad.

Ella siempre había querido ser médico, pero no cualquier médico, sólo médico rural. Aún era la ilusión de su vida y aún estaba a tiempo de poder cumplirla. Probablemente no en un futuro inmediato, pero era una idea que no había desechado. 
Ella era de una comarca abandonada de la mano del hombre (o de la Junta que viene a ser lo mismo) en materia sanitaria. Y lo que quería cuando empezó a estudiar era llegar a ser médico de allí, no de cualquier lugar: de allí. Así que estudió, acabó la carrera y se presentó al MIR con la única intención de coger Familia. Y lo consiguió: cogió lo que quiso, donde quiso.
Habían pasado 7 años en su vida y en su zona todo seguía igual. Estaban, ademas, demasiado lejos de cualquier lugar en una urgencia. 
Trabajando como residente comenzó a ser consciente del tiempo. Ése que puede pasar sin que te mueras si nadie te hace nada y que depende de cada enfermedad. Y comenzó a tener un botiquín de urgencias en el pueblo "por si acaso". Entonces decidió formarse mucho mejor en urgencias y emergencias, para poder resolver situaciones cuando trabajase allí . Tenía claro que su vida no era el hospital. Durante ese periodo de su vida tuvo la suerte de contar con excepcionales tutores: a la vez maestros y profesionales.

Y un 24 de febrero, un par de meses antes de acabar la residencia, recibió la llamada de su hermana pequeña.  Lo recordaba perfectamente, estaba estudiando en la biblioteca del centro de salud. 
Le dijo: " He visto aquí un anuncio que dice: "Importante empresa del sector sanitario, busca médicos para urgencias", admiten al examen médicos residentes de último año, ya he llamado. No me han dicho quienes son, sólo que habrá un examen y que envíes el CV". Y así, sin pensarlo mucho, con la perspectiva de poder estar juntas aunque fuese lejos de casa, lo envió y casi sin querer echó la bola a rodar.
Unos días después se encontraba haciendo un examen psicotécnico y una entrevista personal con una psicóloga en un idioma que no era el materno pero que entendía. Más tarde un examen teórico y un práctico le daban una plaza de médico en un servicio 061 en una gran ciudad. 

Así comenzó una historia que dura ya 13 años y éste podría ser mi lugar de trabajo (aunque el mío está mejor distribuído).

ambulancia interior 3  


4 comentarios:

pseudosocióloga dijo...

Lo que está claro es que lo tuyo es vocacional.
Y el que la sigue, la consigue.

el chico de la consuelo dijo...

Yo me pegué cinco años opositando
y empezaba a estar aburrido de la vida
un dia mi mujer (entonces novia) me mandó a echar la solictud
a un master gratuito para una amiga, que tenia fama de ser muy bueno.
Habia quince plazas para doscientas solicitudes y me hizo gracia e hice una apuesta conmigo mismo, si por casualidad me cogen en este master dejo la oposición...y eché la solicitud.
Y me cogieron y una cosa llevo a la otra hasta hoy. La cosa tiene aun más gacia porque faltaban dos meses para el examen.
La vida se construye con casualidades.

!! alegria verte de vuelta escritora a ver si convences al otro negociado para que vuelva también!!

sin más palabras dijo...

Está claro que para ir en una ambulancia medicalizada (¿se dice así?) hay que tenerlo muy pero que muy claro... y por lo que he leído, tú lo tenías cristalino, quizás no lo de la ambulancia, pero si el atender en Emergencias.

Un besazo

112 dijo...

Pseudo: no tengo claro lo que quiere decir "vocacional", siempre me ha parecido algo raro. A mi me gustaba la medicina,pero a los 17 (cuando elegías carrera) tambien elegí físicas y magisterio, por ese orden. Eso si, una vez metida en harina me gustó lo que estudiaba y me gustaba el posible futuro. Ahora me gusta mi trabajo y me da de comer, y poder tener las dos cosas juntas me hace sentir una privilegiada. Pero eso no me hace sentir que tenga "vocación".

ECDC:estoy de acuerdo en que la vida se construye muchas veces con casualidades, a mi me ha pasado mas de una vez y afortunadamente siempre fue para mejor.
Respecto a lo de ecribir... bueno, creo que no soy de post diario, ni siquiera semanal. Ya te dije que escribo en los tiempos libres de las guardias y a veces los hay y a veces no. Si te dijera que voy a escribir mucho mas, te mentiría.
El Cazurro escritor anda desaparecido. Yo tambien lo echo de menos. No se cómo se le puede convencer, pero él es un poco TOC (obsesivo-compulsivo) asi que cualquier dia que cambie la luna o así, volverá.

Sin mas : se dice así, aunque luego en abreviaturas sea UVI,UME, SVA etc. Y sí , me gusta mucho mi trabajo,pero no creas, que tambien me llevo mis requemones. Supongo que es como cualquier trabajo: sus cosas buenas, sus cosas malas, sus matices... pero si te gusta disfrutas.